Hay refranes que son verdad y otros que, en ocasiones, no aciertan ni por los pelos. El que dice "más sabe el tonto en su casa que el cuerdo en la ajena", en el caso de la retirada de Zapatero, parece acertado aunque no lo es, también en el caso concreto, aquel otro que reza "una retirada a tiempo es una victoria", porque la situación delata lo contrario. El señor Rodríguez, alias Zapatero, se marcha (antes de que lo despidan) y hace válido el primero de los refranes. Aunque, según me cuentan, anda por los pasillos de La Moncloa entonando eso de:
Aunque me voy, no me voy,
aunque me voy no me ausento
porque me voy de palabra
pero no de pensamiento.
El segundo refrán, el de la victoria, es otro cantar. Tal vez, en lugar de retirada, el discurso optimista del señor Rodríguez sustituya el término por "avanzar hacia atrás" lo cual, como podemos entender, produce el mismo resultado aunque dulcifica el lenguaje.
Y, ahora, viene la época del triunvirato: dos cantados y uno por cantar ("...con la Iglesia hemos topado, Sancho").
No hay comentarios:
Publicar un comentario